Adieu

"Buenas noches, espero que duermas bien" Cada día que me despido me siento más vacía y me cuesta un poco más decir adiós. Quiero correr entre medio de las fechas, quiero desprenderme del tiempo, quiero transportarme al momento perfecto y eterno en el que no te dejaré...quiero posarme sobre el día y la hora en que no te tendré que decir adiós.

Allá, mientras amanece, yo comienzo a cerrar mis ojos, para después despertar y creer que todo lo que viví volverá a suceder. Cada día que se apaga, es una historia que se escribe...una historia que termina con un "Buenas noches, espero que duermas bien. Hasta mañana".

¿Hasta cúando digo adiós?

Un dibujo

Sin colores...puedo ver lo que piensas a través de tus ojos. Puedo sentir la textura de tu piel mientras sigo el marco de tu rostro. Te tengo entre mis manos, no te quiero soltar, no te quiero dejar.
Está plasmado en papel con trazos de carbón, con un degrade en tus mejillas y con labios destacados. ¿Eres tú? Podría llegar a creerlo si tan sólo puediera sentir...

Te tengo entre mis manos, eres el retrato perfecto del hombre de mis sueños.

Un error, otra vez

Ya perdí la cuenta de cuantas veces me he equivocado. Aún más, es otro error que cometo contigo. Te hago daño sin querer.

Siempre te reprocho, siempre exijo más, siempre pienso en mi y en nadie más. Lo siento.

Bajo lunas extranjeras

Así, tal cual...

El horario juega en contra, miro la luna y me acuerdo que tu duermes. Me siento cada día más desesperada, más involucrada en un juego del cual podría salir dañada.

Solía creer que todo era hoy, que nada esperaba un mañana, pero ahora, con la puerta en la cara, me di cuenta que todo depende de lo que sucederá "mañana". Justamente.

Sueño mientras camino...cuando de reojo miro el reloj y me doy cuenta que el cielo ya se oscureció, que tu ya no estás, que no volverás, que te tendré que esperar, que tú tendrás que esperar...

Leo pensando en lunas extrajeras, en el momento en que yo comparta la escasa claridad contigo y vea mi propia luna a la distancia.

Mi espejo

Estaba sola y miraba la figura que tenía frente a mi. La observé, seguí cada segmento de sus cortes, de sus tonos, sus límites...había cambiado tanto, había desaparecido la niña que hace tanto había soñado con tocar la cima. Su rostro era diferente, dejaba ver el paso de los años. ¿Qué tenía? ¿Qué había pasado?

Sus rasgos eran más finos, ahora su piel ya no brillaba tanto como cuando le sonreía a sus problemas, pero la forma de sus ojos no había cambiado: seguían teniendo la expresión otoñal que alguna vez tuvieron.

Seguí el recorrido de sus formas, llegué a sus hombros y me detuve algunos instantes para ver como caían...ahora eran redondos y de ellos colgaban brazos más fuertes y formados, algo nuevo en su cuerpo.

Era una mujer su cuerpo lo demostraba. Sus caderas,sus piernas...sus manos, su piel. Era una mujer.

Seguí frente al espejo y noté que ya no soy la misma.

¿Me aceptas?

Me dijiste que habías olvidado, dijiste que eso había quedado en el pasado...pero realmente no me haz aceptado.
¿Te duele? ¿Te molesta? ¿Por qué lo escondes de mi? ¿Por qué no me dices que es lo que te irrita de mi?
Aún no te das cuenta que estoy aquí, todavía no sabes cómo reaccionar frente a mi. No sabes que cada palabra que dices me hiere, me quema...Disculpa si no soy lo que esperas que sea, pero siempre fuí lo que ves.
¿Me aceptarás algún día? Las imperfecciones vienen conmigo, y tú no estás dispuesto de amar errores.

Oscuridad

La niebla en la calle, el silencio en mi dormitorio.
No hay nada que me quite tu imagen, nada destroza lo que yo siento...
La oscuridad...